Absurda intolerancia
10 AGO 2011 18:00
Ignacio Conde.- La visita del Papa a Madrid en los próximos días es una realidad, evidentemente. Es también una obviedad que hay gente a favor y en contra de la llegada de Bendicto XVI, nadie lo pone en duda y es muy respetable. Pero que la visita está financiada por todos los contribuyentes, es absolutamente falso, puesto que ha sido pagada por voluntarios y por la propia Iglesia. Por lo tanto, yo me pregunto, ¿cuál es el daño que genera este encuentro, si lo único que reporta es felicidad para un determinado sector de la sociedad?
Además, no se debe olvidar que, este tipo de eventos, reportan una serie de beneficios económicos importantes a las ciudades que los albergan. Entonces, ¿por qué hay tanta intolerancia y falta de respeto?.
He visto que se ha organizado una manifestación anti-Papa secundada, como no podía ser de otra manera, por partidos de la extrema izquierda y por los amigos del 15-M que, visto el poco tirón de sensatez que tienen, intentan ir por otros derroteros y por los sindicatos, buscando paralizar los medios de transporte para que la gente tenga dificultades para ver al Papa. Por cierto, ¿no se supone que, con la que está cayendo en España, los sindicatos deberían ocuparse de sus siglas, es decir, de los trabajadores y no de estos asuntos partidistas? Claro, estos grupos ya no son lo que eran. Y todo gracias a las jugosas subvenciones que les reporta el Gobierno que, en vez de gastarlas por y para el trabajador, las utilizan para las famosas mariscadas (eso sí es gasto injustificado del dinero publico).
Pero, insisto, ¿por qué tan poca tolerancia? Yo no estoy para nada a favor de la visita del Papa, pero respeto aquellos a los que hace feliz este encuentro, y más cuando sé que a mí no me va a costar nada. ¿Porqué esta persecución hacia la sociedad católica?, ¿qué mal hace esta visita?. ¿Acaso estos grupos discrepantes se piensan que el Papa les va a 'hipnotizar' para que sean fervientes seguidores?. Por favor, un poco de sensatez y sentido común.
Es evidente que España es un Estado laico aconfesional y eso hay que respetarlo pero, ¿por qué no se producen estas reivindicaciones cuando visitan nuestro país otros líderes espirituales o representantes de otras religiones, como el Dalai Lama?, ¿es raro, no?.
De verdad, no puedo entender por qué en los tiempos que corren existe tanta intolerancia, si la clave de la convivencia es el respeto hacia las creencias de cada uno.
Esperemos, por el bien de la sociedad, que España retome el rumbo que llevaba hace años y deje de haber tanta crispación.
Además, no se debe olvidar que, este tipo de eventos, reportan una serie de beneficios económicos importantes a las ciudades que los albergan. Entonces, ¿por qué hay tanta intolerancia y falta de respeto?.
He visto que se ha organizado una manifestación anti-Papa secundada, como no podía ser de otra manera, por partidos de la extrema izquierda y por los amigos del 15-M que, visto el poco tirón de sensatez que tienen, intentan ir por otros derroteros y por los sindicatos, buscando paralizar los medios de transporte para que la gente tenga dificultades para ver al Papa. Por cierto, ¿no se supone que, con la que está cayendo en España, los sindicatos deberían ocuparse de sus siglas, es decir, de los trabajadores y no de estos asuntos partidistas? Claro, estos grupos ya no son lo que eran. Y todo gracias a las jugosas subvenciones que les reporta el Gobierno que, en vez de gastarlas por y para el trabajador, las utilizan para las famosas mariscadas (eso sí es gasto injustificado del dinero publico).
Pero, insisto, ¿por qué tan poca tolerancia? Yo no estoy para nada a favor de la visita del Papa, pero respeto aquellos a los que hace feliz este encuentro, y más cuando sé que a mí no me va a costar nada. ¿Porqué esta persecución hacia la sociedad católica?, ¿qué mal hace esta visita?. ¿Acaso estos grupos discrepantes se piensan que el Papa les va a 'hipnotizar' para que sean fervientes seguidores?. Por favor, un poco de sensatez y sentido común.
Es evidente que España es un Estado laico aconfesional y eso hay que respetarlo pero, ¿por qué no se producen estas reivindicaciones cuando visitan nuestro país otros líderes espirituales o representantes de otras religiones, como el Dalai Lama?, ¿es raro, no?.
De verdad, no puedo entender por qué en los tiempos que corren existe tanta intolerancia, si la clave de la convivencia es el respeto hacia las creencias de cada uno.
Esperemos, por el bien de la sociedad, que España retome el rumbo que llevaba hace años y deje de haber tanta crispación.
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