Nuestro mundo está dirigido por dos grandes familias de valores : la riqueza material y la riqueza interior. ¿Cómo podemos armonizar estos valores? Eterno dilema entre el ser y el tener, entre lo existencial y lo esencial.
En los primeros tiempos de intercambios comerciales, los hombres funcionaban a través del trueque.
Por comodidad, el dinero apareció. Qué grande y qué bella creación : en vez de tratar de enontrar a una persona que tuviera un objeto que ofrecer y, al mismo tiempo, desease el objeto que yo ofrecía, con el dinero ya podíamos comprar en un lugar y vender en otro. La energía puesta en nuestro trabajo se almacenaba en forma de dinero utilizable para todo. El dinero era una verdadera fuerza de almacenaje.
Y, ¿porqué no considerar hoy el dinero como energía? Porqué no pensar que entre el ser y el tener, "yo tengo" dinero obtenido acorde con nuestra manera de ser y de proceder. Nuestras acciones y nuestra manera de ser en nuestro trabajo se dan como fruto energía-dinero. Si gastamos ese dinero en crear un excedente de ser y de dicha, se convierte en fuente de vida. Si ese dinero gastado no paorta ni serenidad ni felicidad, la cadena de la bella energía se rompe.
De la misma manera, el verdadero comercio justo debería permitir al vendedor y al comprador desarrollar el ser, su identidad, sus valores interiores. Si yo vendo, vendo eso que soy. Si compro para mí y para mi familia, consumo para ser mejor.
El dinero deja de ser un obstáculo, y se convierte en aliado del ser, de todos los seres que aceptan este nuevo reto de hoy.
Por contra, ¿Cómo situarse ante el dinero generado por las plazas bursátiles y los lobbies internacionales? Este dinero no es energía obtenida con trabajo. Esperemos que algunas personas lo puedan reconvertir en energía de vida, como el alquimista transforma el plomo en oro, el oro en riqueza interior.
Sea cual sea este dinero, reflexionemos osbre cómo volverle a dar vida a través de los valores esenciales, lejos de la codicia.
Alain Delaporte-Digard para Buddhachannel.tv
miércoles, 12 de mayo de 2010
Una semana sobre budismo, ser y comercio justo
jueves, 4 de febrero de 2010
Obama, "más duro" en comercio con China
El presidente de Estados Unidos,
Obama, "más duro" en comercio con China
En una reunión celebrada este miércoles con senadores del Partido Demócrata, Obama prometió "presión constante" a China y a otros países para que cumplan con sus compromisos en acuerdos comerciales.
Sin embargo, China desestimó las amenazas. Ma Zhaoxu, portavoz de la cancillería china, rechazó la acusación de que la tasa de cambio internacional de su moneda le da una ventaja injusta sobre el dólar. Zhaoxu dijo que el yuan estaba en un buen nivel y que el problema no se resolvería con presiones y acusaciones infundadas.

Obama prometió "presión constante" a China para que cumplan con sus compromisos.
Por su parte, Obma también advirtió que su intención no es dar pasos proteccionistas, algo que consideró "un error".
"Lo que no quiero hacer es, para nosotros como país o como partido, alejarnos de la competitividad internacional. Nuestro futuro va a depender de nuestra habilidad para vender nuestros productos en todo el mundo, y China va a ser uno de nuestros grandes mercados", aseguró.
El líder estadounidense también dijo que habrán de vigilar los tipos de cambio de las monedas internacionales para garantizar que algunos países no disfruten de ventajas injustas frente al dólar.
"Uno de los desafíos que tenemos a nivel internacional son las divisas y cómo estar seguros de que a nuestros productos no se les aumenta el precio artificialmente y que a sus bienes no se les baja", explicó.
El corresponsal de la BBC en Washington, Imtiaz Tyab, dijo que, aunque Obama no mencionó específicamente el yuan chino, EE.UU. presiona desde hace tiempo a China para que Pekín permita la revalorización de su moneda.
clic Lea: relaciones China-EE.UU. en un mal momento
Tensión entre Pekín y Washington
Lo que no quiero hacer es, para nosotros como país o como partido, alejarnos de la competitividad internacional. Nuestro futuro va a depender de nuestra habilidad para vender nuestros productos en todo el mundo, y China va a ser uno de nuestros grandes mercados
Barack Obama
Y éste es sólo uno de los varios frentes de tensión abiertos entre ambos países.
Este sábado, China anunció que suspendería los intercambios militares con Washington como consecuencia de la venta de armas estadounidenses a Taiwán –cuya independencia nunca ha sido reconocida por Pekín- por valor de US$6.400 millones.
Además, la Casa Blanca anunció recientemente que Obama tiene la intención de reunirse con el líder espiritual tibetano —quien vive en el exilio desde 1959— y visitará Estados Unidos en dos semanas.
Por otro lado, esta desavenencia se suma a los roces que ambos países han tenido últimamente en torno a la presencia de Google en China y a la censura en internet.
A finales de enero, Estados Unidos responsabilizó a Pekín de haber orquestado ataques cibernéticos contra cuentas de correo de disidentes chinos en Google.
El Ministerio de Industria chino rechazó estas acusaciones y aseguró que "la política de China sobre la seguridad en internet es transparente y consistente".